del incendio
me secuestro contigo
amordazado en el sótano
tápame la boca, a veces muerdo
amordazado en el sótano
tápame la boca, a veces muerdo
tu hielo en mi espalda
las yemas de mis dedos
son hierro fundido
en torno a un recuerdo
y tiemblo en tus brazos
y finjo en silencio
qué demonios me estás haciendo
me llevas de vuelta a casa
como a un niño pequeño
tiritando de frío
vomito las cenizas
escondidas entre mis dientes
y me inmolo por dentro
apagando tu recuerdo
para que no vuelvas a encenderte
incendiando a tu paso mis cicatrices
recuerda que fuiste pólvora
desde el instante en que me viste
y decidiste jugar con mis heridas
no podré florecer para ti
ni fingir otra vez el verano
yo no puedo acabar con tu invierno
quiero dejar de querer así
quiero dejar de gritar por dentro.
Comentarios
Publicar un comentario